sábado, 5 de diciembre de 2015

Maltrato animal, un crimen legal.


Quien asume la tortura y el asesinato
de otros seres como algo ajeno...

Es tan responsable como el torturador
y el asesino...

viernes, 4 de diciembre de 2015

Los animales y nosotros...


Los animales no tienen una voz, ellos necesitan que tu
hables por ellos.

Defender a los animales no significa preocuparse más
de ellos que de las personas...

Se trata de proteger a otras especies de tratos crueles
e injustos y de no causarles ningún daño...

Estar interesado en los derechos animales no te hace
ser “raro”...

Querer terminar con el sufrimiento es algo de lo cual
deberías estar orgulloso...

Hacerte vegetariano o vegano, no comprar ciertos productos
por que han sido testeados en animales y decir que no quieres
ir al zoológico o a un circo con animales son todas formas
importantes con las cuales puedes ayudar a hacer de este
mundo, un lugar más bondadoso...

Nunca dejes que alguien te haga sentir que estás equivocado.

Siempre recuerda que los animales no tienen una voz
Ellos necesitan que tú hables por ellos...

Qué Derechos Necesitan Los Animales?

Obviamente, los animales no necesitan de forma exacta
los mismos derechos que las personas...

Por ejemplo, el derecho a votar en elecciones sería inútil
para un loro...

Pero el derecho a la libertad, el derecho a ejercitar su propia
y libre voluntad y a vivir sin ser encerrados o torturados son
tan importantes para los animales como lo son para nosotros.

Por Qué Preocuparnos De Los Animales?

Hoy es reconocido que los animales, como los humanos
experimentan felicidad, tristeza, miedo, dolor físico, rabia
y aburrimiento...

Sabemos que ellos usualmente disfrutan de la compañía
de sus iguales, que hay una conexión cercana entre
las madres y sus hijos, que los animales jóvenes
disfrutan y aprenden del juego, y que ellos desarrollan
amistades...

Ellos tienen necesidades, al igual que las personas...

jueves, 3 de diciembre de 2015

Se retomara la caza de ballenas en Japón

Japón retomará la caza de ballenas en Océano Antártico con fines científicos

Autorizarán la pesca en el Antártico de un tercio del total de ejemplares establecido en anteriores programas.

Japón planea retomar su programa de caza de ballenas con fines científicos en el Océano Antártico, donde no pescaba desde hace dos años tras un dictamen de la Corte Internacional de Justicia (CIJ).

La próxima semana el Gobierno japonés concederá un "permiso especial" al Instituto de Investigación de Cetáceos por el que autorizará la pesca de "un tercio" del total de ejemplares establecido en anteriores programas.

En concreto, Tokio autorizará la caza de 333 ejemplares de ballena Minke en esta zona marítima para ajustarse a la sentencia de 2014 de la CIJ, que estableció que la pesca ballenera de Japón no se ajustaba a los "fines científicos" establecidos por la Comisión Ballenera Internacional (CBI), sino que respondía a intereses comerciales.

Japón, que firmó la moratoria total de la pesca de ballenas con fines comerciales que entró en vigor en 1986, se ampara en el artículo VIII de la Convención de 1946 de la CBI para proseguir con las capturas científicas de cetáceos.

Sin embargo, estas capturas han provocado en los últimos años fricciones con las organizaciones animalistas y con otros países, como Australia, que demandó a Japón ante la CIJ en mayo de 2010 al considerar que perseguía fines comerciales con este programa.

Hasta su prohibición por parte del Tribunal internacional en 2014, en las campañas balleneras de Japón se capturaban 850 ejemplares de rorcual aliblanco, 50 de ballena jorobada y otros 50 de rorcual común para fines científicos.

La sentencia de La Haya señalaba que este programa era "poco transparente" y que el país asiático no podía "explicar" las razones por las que aumentó el tamaño de la muestra respecto a anteriores fases de su programa científico.

"La medida no es razonable en relación a la consecución de los objetivos", concluyeron los jueces en su fallo.

Por su parte, Tokio aceptó entonces cumplir con la sentencia, de carácter vinculante, y dos años después del fallo reducirá la pesca de ballenas de 950 a 333 ejemplares.

¿Realmente vale la pena la captura de tanto ejemplares con fines "científicos"?

martes, 1 de diciembre de 2015

Maltrato con los animales: ¿por qué se da y cómo evitarla?


Las personas que nos preocupamos por los animales y el trato especial que reciben de parte de la sociedad, siempre nos hacemos la misma pregunta: ¿cómo es posible que existan actos de crueldad hacia ellos? Tanto a nivel particular como social; se trate de perros, gatos o animales que se califican "de granja", "de entretención", etc., siempre aparece algún caso que produce escándalo en la opinión pública, o sólo constatando el hecho de que todos hemos tenido algún vecino/familiar/amigo desvergonzado que, en mayor o menor grado, maltrata a sus animales. En todos estos casos, la pregunta sobre las causas del maltrato es la misma.


Maltrato no intencional

Muchas de las personas que abusan o maltratan a los animales no lo hacen a propósito, o al menos, no consciente ni intencionalmente. Todos hemos sido educados en una sociedad donde le dan un lugar a los animales como "cosas insensibles" y que no tienen validez moral, por lo tanto, actuamos en consecuencia. Entonces, las personas no se dan cuenta de lo que hacen, ni mucho menos, reflexionan sobre ello. Con los animales no humanos "siempre se ha hecho así" y por lo tanto, no importa cuestionarse qué o cómo hacemos con ellos. Los animales no sienten, y "si es que sintieran", sus sentimientos no importan ni son relevantes; por lo tanto tampoco importa mucho lo que hagamos con ellos. Aquí entran los casos de negligencia, es decir, en los que se falla al proveer a un animal de sus requerimientos más básicos de alimentación, agua, refugio y cuidados veterinarios. También hay negligencia cuando se desconocen, ignoran y por lo tanto, no se tienen en cuenta, las necesidades psicológicas y emocionales de los animales.

En estos casos, la única solución es la educación y sensibilización. Estas personas pueden aprender y entender que están siendo crueles con sus animales, conociéndolos en su fisiología y comportamiento, para que vean el maltrato y tomen conciencia respecto a las necesidades de sus animales, poniendo sus actos en perspectiva: que se den cuenta de que lo han estado haciendo mal. 

Maltrato intencional

Otro grupo de personas que maltratan a los animales lo hacen a propósito y con pleno conocimiento de que lo que hacen es malo; pero lo hacen por un corto período de tiempo, o lo ejecutan en pocas ocasiones. Por ejemplo, un grupo de niños que decide lanzar piedras a los nidos de los pájaros, o maltratar a un gato/perro que ronda en el vecindario.

Estas personas usualmente son jóvenes y dañan a los animales porque no están pensando en el daño sino en la diversión de ejercer poder sobre ellos, o también porque no pueden oponerse a la presión que ejerce el grupo de amigos. 

Quienes no están pensando en el daño ocasionado pueden estar molestos o sentirse frustrados, y descargan su rabia contra los animales; o bien piensan que es entretenido ver cómo el animal se retuerce o huye. En cualquier caso, no están pensando en los sentimientos de los animales a los que causan daño, ni en la magnitud del daño que le están causando, mucho menos en las consecuencias para el animal.
El daño intencional a los animales es un tema serio, que debe ser reorientado y castigado. Nunca son "bromas o inocentadas de niños", sino que se trata de actitudes que, de no ser reorientadas, podrían perpetuarse en el tiempo.

Maltrato intencional cruel

Estas personas son las que maltratan a mayor nivel y sistemáticamente de manera intencional, porque disfrutan provocando daño a otros seres vivos, por el hecho de sentirse poderosos.

Estas personas necesitan ejercer su poder sobre otros, y dañarán a los animales porque piensan que de esa manera los controlan y gobiernan. O también, maltratan al animal para ejercer su poder sobre otra persona. Otras personas harán que sus animales dañen a otros animales, porque eso les convierte en una dupla poderosa, donde evidentemente, quien tiene el control es el dueño. 

Otras personas simplemente disfrutan ejerciendo la violencia y provocando dolor a otros seres vivos. Éstas personas, por regla general, en su violencia suelen destruir objetos inanimados, además de hacer daño torturando y provocando dolor a los animales y a otras personas.
Las personas de este grupo sufren serios problemas psicológicos que no pueden dejarse desatendidos porque no "pasarán" con el tiempo. Estas personas necesitan, con urgencia, apoyo profesional que les rehabilite en sus relaciones sociales y con su entorno inmediato. Sin ayuda, los problemas psicológicos de estas personas los afectarán de por vida, y ellos continuarán maltratando -de manera cada vez más violenta- a otros seres vivos, y seguro que también a otras personas.

Con este breve análisis podemos entender un poco mejor qué hay detrás de los actos de maltrato y crueldad con los animales, y tratar de actuar en consecuencia en nuestro medio más inmediato. También nos permite reflexionar críticamente sobre la situación de nuestro entorno, y tener voces de alerta ante, por ejemplo, la presencia de menores que están permanentemente torturando animales. 
Los animales sienten, y por lo tanto, son capaces de experimentar dolor, de sufrir y también de gozar de estados de bienestar.